sábado, 14 de mayo de 2011

Yo no me arrepiento de nada


La frase que encabeza esta entrada es para mí una de las más enigmáticas que se pueden oír.

Hay gente, aunque parezca increíble, que tiene a gala no arrepentirse de nada. Ni de lo hecho, ni de lo dicho, ni de lo callado, ni de lo omitido.
Parece ser que, echando la vista atrás, deducen que su vida es un conjunto de decisiones bien tomadas, de opiniones bien expresadas, de momentos bien escogidos. No saben lo que es la culpa, el arrepentimiento, la duda...
Unos lo harán por prepotencia, otros por ignorancia, otros por estulticia, otros por orgullo, otros por... Quién sabe.

Claro que en el otro extremo están los que se arrepienten de todo, los que viven en la duda absoluta, en el "si hubiera dicho..." "si hubiera hecho..." "si pudiera volver a empezar..." "si aquel día, aquel momento, aquel año..." Para todos ellos debería inventarse la herramienta ideal: la goma de borrar vida, de borrar palabras, de borrar actos, de borrar inmovilidades.

Estoy trabajando en este invento para donarlo altruistamente a la humanidad. ¿La razón de tanto esfuerzo?: La caridad bien entendida empieza por una misma.

(Imagen: autopoder.blogspot.com)